I. INTRODUCCIÓN
Actualmente, como se tiene conocimiento, estamos en una era tecnológica, donde, si no estamos inmersos en ella, estamos desconectados del mundo o fuera del contexto de oportunidades; y el ámbito educativo no es ajeno a ello. Y es que el sistema educativo, se encuentra vinculado e influenciado en gran magnitud por la innovación tecnológica y el desarrollo de las tecnologías de la información y de la comunicación, situación que supone cambios en los modelos educativos, en los usuarios de la formación y en los escenarios donde ocurre el aprendizaje (Salinas, 1997).
Asimismo, la tecnologia
II. DESARROLLO
Acorde a Ruiz & Tosca (2015),
la integración de recursos tecnológicos en la educación da lugar a ambientes de
aprendizajes más ricos, lo cual permite la transformación de la práctica
educativa; asimismo, estos cambios tienen efectos considerables, tanto en la
concepción del alumno - docente de estos nuevos ambientes de aprendizaje, como en
el rol del profesor y en la función de las instituciones que gestionan la
enseñanza (Salinas, 1997).
Ahora bien, centrando el tema
específicamente en el aula de clase, entorno en el cual a diario se ejecutan
procesos de enseñanza – aprendizaje, los cuales, cabe mencionar, en algunos casos, aún presentan cierta “rigidez” hacia a una educación futura e innovadora, por lo que
requieren adaptarse prontamente (Salinas, 1997). A su vez, es cierto que, las
nuevas tecnologías traen consigo nuevas opciones educativas, que día a día
emergen y están revolucionando los sistemas de enseñanza, rompiendo el
“esquema” de los ambientes educativos tradicionales.
Como sostienen Pérez & Telleria (2012): Las TIC han dado lugar para crear nuevas condiciones que brindan la posibilidad de construir ambientes de enseñanza y aprendizaje que ofrecen, por una parte, comunicación sincrónica, es decir, simultánea en el tiempo y, por la otra, asincrónica, donde el mensaje se emite y se recibe en un período de tiempo posterior. Precisamente, estas posibilidades comunicativas permiten introducir metodologías de trabajo virtual en una sociedad caracterizada entre otras cosas, por la interconectividad, la multiculturalidad, la hipertextualidad, de condición paradójica y trazada por la incertidumbre.
Por lo tanto, estos nuevos
escenarios para el aprendizaje necesitan ser abordados desde la perspectiva de
un aprendizaje abierto y flexible. No podemos ser rígidos y cuadriculados; es importante que se tenga presente que las TICs, contribuyen
al desarrollo del estudiante, ya que constituyen herramientas que enriquecen y
coadyuvan a largo plazo a la calidad y formación de futuros profesionales ajustados a su realidad.
Se trata, en definitiva, de incrementar
las oportunidades educativas, lo que trae consigo la necesidad de que los
docentes desarrollen competencias para el uso pedagógico de las TIC, que les
permita atender a las nuevas generaciones de educandos que cada vez, a más
temprana edad, incursionan en el uso de las TIC; significativo.
III. CONCLUSIÓN
Por lo tanto, el reto actual del docente perteneciente al siglo XXI es crear y apropiarse de nuevos ambientes de aprendizaje (Ruiz & Tosca, 2015);
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Pérez, A., Telleria, M. (2012).
Las tic en la educación: Nuevos ambientes de aprendizaje. Revista de Teoría y
Didáctica de las Ciencias Sociales. Mérida-Venezuela. ISSN 1316-9505.
Enero-Diciembre. Nº 18, pp. 83-112. Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/652/65226271002.pdf
Ruiz, T. & Tosca, C. (2015).
Competencias en nuevos ambientes de aprendizaje: para acceder y compartir
conocimientos. Formando licenciados en Ciencias de la Educación. Revista
Espectros. Disponible en: http://132.248.9.34/hevila/Perspectivasdocentes/2015/no58/4.pdf
Salinas, J. (1997). Nuevos
ambientes de aprendizaje para una sociedad de la información. Revista
Pensamiento Educativo. PUC Chile. 20, 81-104. Disponible en: https://www.ses.unam.mx/curso2008/pdf/Salinas.pdf.
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